Cartas de despedida al Baloncesto III
Tras pasar por Estudiantes, como os comentaba, llegué a Murcia, a Alicante, a Badajoz… volví a Madrid con la mítica Complu, y el gran Miguel Angel Martín. Pero nunca recuperé esa libertad y confianza de mi época estudiantil. Siempre he querido disculparme. primero con los clubes y la afición de estas ciudades y magníficos equipos, y luego conmigo mismo. Ahora… pues lo hago. SIENTO NO HABER DADO TODO MI POTENCIAL.
Cómo te he contado en más de una ocasión, amigo baloncesto, es curioso cómo te hace funcionar la mente, la mentalidad fija. No ves las cosas como un reto. Vas a lo fácil y a lo que crees que dominas. Te convences de que estas por encima de muchas cosas y si no es así, es que no merecen la pena. Y todo esto te termina convirtiendo en un prisionero de ti mismo, te aleja del SER. Y al final, te lleva a una pérdida de confianza profunda, que no solo te lleva a reducir tu rendimiento, eficacia y eficiencia. Además, destroza tu autoconcepto. Aunque mantengas una fachada de fortaleza e incluso te digas: “a mi plin que yo soy Juanjo Ayuso”, tu autoconcepto está enfermo. No sueles definirte con palabras agradables. Te oyes cosas cómo: “No vales para nada, como es posible que te haya pasado esto, es que eres muy malo, no metes una, no defiendes…” “Me tienen manía, yo que soy una estrella…” Y ante esto, ¿dónde están tu libertad y confianza como deportista profesional? ¿Te has maltratado de palabra alguna vez así? ¿Miedo?
Sobrevives por tu entrenamiento, pero sacrificas tu libertad y confianza
Viejo amigo, cuando tu potencial está por salir y no logras que la mentalidad de crecimiento domine, te limitas a sobrevivir. Vives de las ¿rentas? y tu autoconcepto es muy limitado. Los valores aprendidos en el deporte, los que ves y entrenas todos los días, son los que te permiten seguir a flote. Tu entrenamiento de alto rendimiento, literalmente te salva. Y el equipo con el que entrenas y te entrena, te mantienen a flote. Aunque haya veces que creas lo contrario.
Querido amigo, sin saberlo, estaba tan entrenado que eso me permitió seguir disfrutando de ti, aunque a veces no me divertía. No tenía ni tu confianza, ni mi libertad. Es difícil describir en unas líneas que pasa por la cabeza de un deportista profesional en estas situaciones. Pero si te puedo decir lo que con la perspectiva actual hubiese hecho. De acuerdo, ya sé que eso no vale, pero si esto ayuda a alguien, valdrá la pena. Entonces sigamos…
La rabia, libertad o camino destructivo
En otra carta querido baloncesto, te hablaba del miedo como estímulo o bloqueante. Ahora te voy a hablar de la rabia, otra emoción básica. Aunque antes quería comentarte algo. Las personas solemos pensar que las emociones son positivas o negativas. Pero esto es erróneo de base. No son buenas o malas, positivas o negativas. Son, agradables o desagradables y bien canalizadas y gestionadas, nos hacen crecer exponencialmente. Mal gestionadas, pues nos hacen ser de mentalidad fija, con lo que eso conlleva.
La rabia. Anda que no he sentido rabia en mi periplo como baloncestista y profesional. Eso si te digo, amigo, si me hubiese entrenado en gestionarla, otro gallo hubiese cantado. Dice Toni Nadal, que el en los jóvenes quiere entrenar el carácter, y que razón tiene. En un club como Estudiantes, o en el deporte de base y de élite, aparte de valores y conocimientos, te entrenan el carácter y las emociones. Hay personas que lo asimilan peor y otros mejor. Pero lo que es seguro, es que mientras que eres profesional, deportivo o de otra índole, esto no se olvida. La rabia, bien canalizada, nos ayuda a ser libres y trabajar por el bien común. Mal gestionada, nos convierte en personas injustas y destructivas.
Saber escuchar es el mejor remedio contra la soledad
Obviamente querido colega baloncesto, por mi parte dejé que la rabia, me dominase en muchas fases de mi carrera, lo que me hizo, como ya te conté perder foco y potencial. Y te sientes solo. Haces grandes amigos, para toda la vida, pero te sientes solo. Salir de un entorno seguro a un entorno absolutamente profesional es una transición que a veces cuesta hacer. Y para eso hay que planificar. Repasemos pues, querido y viejo amigo. Hay que entrenar, no solo el físico. Los valores, actitudes y caracteres también. Entrenar la gestión emocional. Hay que entrenarse en la mentalidad de crecimiento. Si lo sé, cansa solo leerlo. Pero con esa perspectiva que da el tiempo, si planificas, entrenas y te comprometes los impactos negativos son menores.
Hay que planificar y para entrenar y planificar hay que saber escuchar. No oír, hay que escuchar. La retirada deportiva si has planificado, es menos traumática. Si no lo has hecho, no hay que preocuparse. Puedes planificar, nunca es tarde. Hazte Kompasser. Por ejemplo, valora como estás financiera, emocional, física y profesionalmente, hazlo ahora.
Las oportunidades se multiplican a medida que se aprovechan
Una vez que planificas, estas en el camino, en el día a día. Ya sea en tu vida baloncestística o profesional. Las personas hablan mucho de la fuerza de voluntad y del positivismo. Y bueno, la fuerza de voluntad dura un tiempo. Una semana, dos, lo que sea. Ser positivo constantemente es imposible, incluso es difícil ser positivo una vez al día.
Pero amigo baloncesto, tú me enseñaste el significado de la palabra rutina. De lo que son los hábitos. Por lo que EL CARÁCTER Y LA ACTITUD SE ENTRENAN a través de rutinas, de hábitos. ¿Sabes que adquirir un hábito es tener un superpoder? Lo que necesitas es entreno, perseverancia y trabajo duro. Para llegar a ser perseverante, debes tener mentalidad de crecimiento, y, sobre todo, cuando una oportunidad se presenta, correr detrás. Si lo haces, tu equipo te ayudará, creareis un contexto de cooperación brutal. Pondréis en valor el alto rendimiento, el entrenamiento y la mentalidad de crecimiento.
Ha sido hace unos años cuando me he dado cuenta de la importancia de los hábitos y de lo que tú me has enseñado, viejo amigo. Más adelante os diré como poner en práctica todos estos conceptos. Solo os digo: cultura de la perseverancia.
Continuará…. Porque en la próxima carta, te hablaré de la mítica Complu… y del CB Murcia, y del Lucentum…. A los cuales conoces bien.